At last

At last from One Mandarino on Vimeo.

i`ll die someday. this is thank you.

Sleep

Cigarro

Sick of tv (2004)

Im so sick of this shit, running on tv.

Video from 2004.

starlight

Sin plan perfecto, ni estrategia previa.

- Es solo un pedazo de plástico, no tiene misterio, no pasa nada grave.

- Para qué la quiere?

- Es una promesa. Y pensándolo bien no es sólo un pedazo de plástico.-

Solo hacía falta combustible porque el impulso ya estaba. Domingos de lluvia, de pinchos de carne dudosa de la 15, de juguetes luminosos callejeros y café, de lucecitas, de multitudes navideñas, de pedir deseos a árboles de bolitas azules sin encender; semana de internado, de tamales, hambre constante, líneas, cigarrillos baratos y lágrimas de verdad, de lunar a dos centímetros bajo el ojo derecho, de pañoletas rojas, de fotos; de ganas de comer borde de pizza rechazado.

En resumen, de medicina inesperada...

.-

Viernes, noche lenta: lleno el tanque con 3 de Buchanans con poco hielo, otros dos de Juanito Caminante y un par de cervezas y así fueron llegando las 2 de la mañana.

Gabriel que me da el último empujón, Juan David que hace lo imposible por sacarme la idea de la cabeza, los tres caminando hacia el parque; yo eligiendo la víctima verde ideal para la operación.

-No, olvídense, yo voy siguiendo, se van a meter en un problema ni el hp, ojalá los cojan.-

El pasto totalmente encharcado y resbaloso, la iluminación apagada y cero moros en la costa.

- Ese de allá, son chiquitas y está bajito. Apenas.-

Escojo una bien blanca, limpiecita. La tomo e intento cortarla con todo y cable y bombilla; la condenada no se deja y empiezo a buscar desesperadamente la toma eléctrica.

-Noo no sea tan marica, se va a electrocutar y va a dejar sin luz a media ciudad!...Jale duro.-

Clack!

Un sonido seco, que fue más fuerte de lo que pareció en ese momento, la estrella finalmente en mis manos, yo miro a Gabriel victorioso, él asustado y con media sonrisa en la boca, soltamos la carcajada y acto seguido cometemos el primero de una serie de errores: correr.
Con el botín debajo de la chaqueta corremos hacia el centro del parque. Si, segundo error.

- Atención, apoyo!, se están robando un adorno del lado norte del parque, atención a todas las unidades! -(si, como en Profesión Peligro o los Magníficos).

Vemos correr hacia nosotros a la vigilante del parque que no habíamos visto antes, le devuelvo el botín riendo, y de la nada aparecen 3 policías tomándome del brazo.

- Noo señor agente, ya la devolví, era un juego, no era en serio,
- No hermanito, es que no tiene plata pa` comprarse una de esas en el centro?!..
- Si pero no es lo mismo (si, correcto: tercer y craso error…)
- Vamos a la patrulla a ver que dice mi Primero. Cédula!-

Caminando hacia la patrulla, con la risa dentro tratando de salirse, todavía no creyendo lo que estaba pasando, hacía lo posible por no caminar en zigzag.

- Señor agente, esto es una exageración, no estaba haciendo nada malo, piénselo bien.
- Súbase. Y usted que, quién es?
- No, yo soy el amigo.
- Entonces qué espera?, súbase!, se van para la estación!

Cinco cagones sin cédula y nosotros dos, arrancamos lo que sería un recorrido en círculos interminable. 92, 11, 85, 13, 82, 15, 93 y de vuelta. Pasan 10 minutos y dejan a los sub18 en el Carulla de la 85. Sin saber que hacer, solo quedaba esperar. Gabriel soltaba mil cuatrocientos argumentos mientras yo lo miraba a él y a la completa indiferencia de “mi primero”.

- Señor agente, nosotros somos gente de bien, no nos lleve a la UPJ, no le estábamos haciendo mal a nadie, trabajamos, yo trabajo en la Vicepresidencia, no nos lleve, no le haga pasar esa angustia a nuestras familias, Señor Agente, Señor Agente, Señor Agente?-

Silencio.

A eso de las 3 y 15 suben a un indigente que bien hubiera podido ser como subir un bulto de cebolla con pelo y gorra. El olor se va apoderando de toda la camioneta y es ahí cuando la risa contenida se vuelve preocupación de delincuente juvenil. Adolescencia tardía, seguro.
El personaje harapiento alegando que lo habían molido a pata, nos muestra su botín sonriendo.

- Me les coroné el celular a esos hijueputas… Señor agente, devuélvase que voy a denunciar a esos pirobos por maltrato, yo no les robé nada señor agente… y vea gonorrea..unas gafas..estas son de aumento?....si?..tome..se las regalo.

Pensando en las futuras 24 horas preso que se hacían más ciertas, con las gafas de "aumento" en la mano, sucias, rayadas y malolientes planeaba...- Pues si toca hacerse parcero de este mancito a manera de protección, que más da, tocó...- No acababa de pensar en eso y ya nos ofrecía unas galletas viejas para comer. El hambre era tanta que tardé más pensando en entablar "amistad" con el hombre que metiéndome la galleta en la boca. Mientras tanto los señores agentes daban su recorrido de rutina; se bajaban todos, recogiamos a otros, volvían a subir, nos haciamos más invisibles, nos hundiamos más en la posibilidad de no dormir esa noche.

- Mire mi primero, minifalda negra a las 12.
- Donde, cabo?
- Ahí ahí, uy no que delicia mi primero. Yo con ese par de patas pa´ que munición!

- Uy...mamacita.

Nos detenemos al frente de una whiskeria, sale una mona teñida de protuberantes redondeces, minifalda negra y dos botellas de Sello Negro,

-Entonces papi, ahí tiene lo de hoy, cuando es que va a volver papito, me tiene olvidada, cuando tiene libre rey?...

Miro la cara de asco de Gabriel, la reproduzco y solo me sale pedirle perdón.

- Esta gente le vale un culo todo, nos jodimos, tocó darles algo. Puta, que mierda.
- Gabo, perdón por meterlo en estas, la cagada; pero viéndolo bien, no estamos tan mal. Ahora nos sueltan, fresco. Igual no voy a darles ni un peso. Mm..bueno... espero.

Cómo hace uno para decir "cómo arreglamos", sin tartamudear. Imposible. Así no funciono.
Con el culo plano y helado, cabía la enana esperanza de recobrar la libertad antes de que saliera el sol. "Mi primero" se estacionó al lado del camión de la UPJ. Ahora sin estrella, ni culo, ni respeto alguno por la ley, solo esperabamos que amaneciera para llamar a que nos llevaran algo de comer a la estación de la "Unidad Permanente de Justicia". Y para cuidarnos el trasero mutuamente durante las horas siguientes.

- Uy ya nos figuró UPJ parceros!
- Bájense! A ver, rapidito y al camión.-

El parcero que me adelantó la navidad con las gafas, fue derechito a subirse como si lo estuvieran recogiendo para irse a la casa. Gabriel y yo en pasos corticos, resignados a medias, viendo como se vomitaban las manos por las estacas del camión.

- Mi teniente venga le cuento bien la historia para que vea que no es just...

- Capitán.

- Eso, perdón, mi capitán, mi primero, mi segundo, todos ustedes. La vaina es que sabemos que fue una estupidez, pero es que es navidad y pues navidad es de regalos y vimos esa estrella flojita y pues la arrancamos, pero ya debe estar otra vez en su puesto. No paso nada, no le hicimos mal a nadie.
- Entonces para usted robar está bien?, echén pa´rriba a ver!.

- Noo mi teniente, por favor, me parece exagerado que nos lleven; piénselo bien, somos gente decente. Es que era..o es..una promesa, y las promesas se cumplen como sea no?.- (otro error fatal a la cuenta...)

- Ah no me diga..como sea??...

- Nooo no..usted me entiende..no?

Silencio. Que claro, pareció una eternidad.

- Sabe qué?..vea, ese carro está vuelto mierda de lo sucio. Ahí verán.

- Mm..pues mi Cabo, usted dirá. Mire en que posición estamos.-

Silencio otra vez. Eterno otra vez.

- Subánse a la patrulla a ver, yo veré bien lavadito.

- Nosotros se la lavamos, lo que no sé es como ni donde, pero usted manda Señor agente.- digo aguantando el asco.
- Cállese y súbase a ver.

Otra media hora de recorrido: un borracho tirado en la 11, otra víctima de la indiferencia policial, la noche avanzando, el cielo aclarando, yo pensando en la pulmonía del día siguiente.

-Ábrales ahí atrás.-

Cinco de la mañana en la hora del celular. No había cerca ni lavadero, ni bomba, ni estación, ni UPJ. Desubicados bajamos frente a la ventana del Capitán, o Teniente, o Cabo primero. En todo caso, el que mandaba; el más gordo, viejo y corrupto de los señores de verde.

- Entonces qué?, Ustedes ni para la lavada del carro no? ..que vamos a hacer...


- ...



- Sabe qué? Ábranse!

Paralizados, sin creer que fuera cierto, vemos la camioneta arrancar y alejarse; tres o cuatro pasos más hacia la Autopista, esperar un taxi y el sonido de la patrulla haciéndose más distante. Respirar. Y reir. A carcajadas.

Y concluir que fue. Y reirse más. Y entristecerse un poco porque es muy dificil vivir en un lugar donde bajar las estrellas es ilegal. Así que a veces hay que fabricarlas. Y a veces eso sale tan bien o mejor que si se hubieran bajado.

Y eso es porque siempre hay algo, siempre hay alguien. Siempre.

Árbol, deseo matarnos las incertidumbres. Si es que eso es algo posible.

50 % cumplido.